La falta de limpieza en las piscinas municipales propicia el asentamiento de una familia de rodaballos
El cubo principal de la piscina de Frigsa ya presenta algas en su superficie
Las acusaciones que la pasada semana se hicieron contra la falta de limpieza que presentaban las piscinas municipales no parecían estar infundadas y, durante este fin de semana, ya han provocado la aparición de especies salvajes.
De este modo, una familia de rodaballos ha comenzado a habitar las tranquilas aguas de la piscina municipal de Frigsa y parece que se quedarán por algún tiempo. Ya han sido varios los animalistas que han salido en su defensa.
Los expertos achacan este brusco cambio de hábitat a las condiciones que presentan las instalaciones y la migración clásica que en invierno hace esta especie de agua salada hacia aguas con alto contenido en cloro.